Leónidas consulta a los éforos: el sanedrín de su pueblo le ordena que no vaya a la guerra: el va a la guerra; sabe perfectamente que los éforos son unos corruptos; gracias a que Leónidas no era un meapilas no tenemos (de momento) a los otomanos a las puertas de Viena.
Es difícil resistir y no dejarse llevar por las oleadas del momento; yo se lo duro que es no asumir la corrección política, y no tengo el nivel de la satrapía, pero pedirles que se resistieran a los empujes groseros de los grandes emporios financieros por el bien de su pueblo sería pedirles que resistieran en las Thermópilas por el bien de la cultura: cosas que ellos no están dispuestos a hacer: el imbécil de José Luis Rodríguez “El puma” bastante tiene con hacer bolos humorísticos por los saraos que le dejan: primero canta Sonsonete, y luego él y las góticas presentan su conocido número “Mami que será lo que tiene Obama” con su repertorio de canciones gastadas del disco “memoria histérica” pero este número empieza a cansar: pronto los veremos por los pueblos con las porretonas y con la Pajín haciendo gracias en el escenario “saben aquel que diu que va un hombre y….” y la Aído (¿ande?) con su monologo diciendo “y entonces llega el cura y…” frente a ellos, hay un número de más elegancia y buen gusto que presentan el conocido ventrílocuo Rajoy y su niña con el numero de “pasaba por aquí” acompañados por las inevitables con tanga y plumeros de la Cospedal y Soraya, más bien patéticas y sin gracia en sus movimientos: Ana Mato lleva la coordinación del espectáculo y Cristóbal Montoro pasa la gorra.
No hace falta que sean de la orden Jedi, al menos que aspiraran a ello. No hace falta la clarividencia de Leónidas: sólo fidelidad a quienes somos y no entregarnos como esclavos a los emporios financieros; tan solo hace falta que digan algo serio, y lo cumplan.
En un rincón, llorando, González Pons de belleza en siete días vestido de pastorcita amargamente desconsolado porque no le han dejado salir al escenario.
2 comentarios:
¡Sí señor! Pero no se puede pedir a esa banda de incompetentes que se ocupen de su país. Es curiosa la parálisis que produce el poder. Estoy seguro que que realmente no tienen ni idea de qué hacer, ni de dónde está el problema. Y, si la tienen, no pueden hacer nada, porque tendrían que empezar por hablar claro y todo menos eso.
Actuar con seriedad implica ser serio.
Actuar con sentido implica tener sentido.
Actuar con fidelidad implica ser fiel.
Actuar con honor implica ser honorable.
Actuar con inteligencia implica ser inteligente.
Actuar con honradez implica ser honrado.
Actuar como un político implica no ser serio, no tener sentido, no ser fiel, no ser honorable, no ser inteligente y, sobre todo, no ser honrado.
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