“Mujer tenías que ser”
Declamó casi hundiéndose Uguin cuando Seminova le informó que si bien la misión se había llevado a cabo, por algún extraño misterio no había sido reeducado del todo y aún sobrevivía. “Mujer tenías que ser” repitió.
Luego le volvimos a explicar uno a uno todos los movimientos, ordenes coordinación y situación del agente hasta el momento de dejarlo solo: en nada habíamos fallado pero por alguna razón el imbécil se porto como un socialdemócrata, o demostró su absoluta falta de sagacidad, y demostró que los tontos útiles han de ser debidamente controlados y dirigidos: el imbécil de Agca dispara, y falla. A los tontos útiles hay que guiarlos hasta el último momento; No le gustó nada al camarada Uguin que no hubiéramos podido hacerle el favor de darle su última orden, reeducarlo y ponerlo adecuadamente al servicio a la revolución: pero con la algarada fue imposible dispararle y acertar en ningún momento, cuando el enemigo clerical hizo presa en el agente, ya quedó fuera de nuestro alcance, siéndonos imposible acabar la misión con la adecuada diligencia
“Mujer tenías que ser”
Pero al ver las imágenes por la TV occidental, casi se suavizó la situación “al menos, ha recibido el mensaje revolucionario de la paz” lo cual si bien no tranquilizó del todo el asunto, si quedó para prepararlo de nuevo siempre que haga falta: la revolución es imparable y el enemigo acecha.
Habrá que ver como acabamos reeducando adecuadamente al camarada Agça, A.
No hay comentarios:
Publicar un comentario