Fustigaba desde el blog subvencionado de Sopena Luis Solana a los neoliberales, neocon, y demás gentuza liberal; desde hace poco ha bajado el tono de sus estupideces: normal, ser de izquierdas ya se ha demostrado lo que es, y lo que implica: este elemento, con su hermanito, eran los íntimos del ahora Rey que iban al palacio del Rey cuando mandaba Franco, pero eso si, eran luchadores clandestinos: “Íbamos con casco” declaró uno de los dos, en una entrevista que leí cuando mandaba ese otro gran luchador antifranquista becado por la falange, F. González, donde eran de la jet set socialista “socialistas” por que ellos con los obreros no se juntan, no se les pegue el olor. Todo su avatar vital se les limita a ser “de toda la vida” y en el caso de Luis su mayor logro fué desde que le nombraron presidente de telefónica, hundirla, pero eso sí, le quitó la palabra “nacional” a la Compañía Telefónica Nacional de España porque tenía “reminiscencias franquistas” si lo sabrá el, tan mimadito del régimen. Supongo que también pondrá en su nuevo currículum que él se hacía pagar por la compañía “Nacional” un viaje en avión privado a Paris para coger el concorde: ¡no iba a ir el a Nueva York en un avión vulgar! te lo juro, tía. A que iba a Nueva York, mejor lo dejamos ahí que puede haber menores leyendo. Eso sí, vivir, a tutiplén, por supuesto.
Este, ahora se dirá socialdemócrata, y lentamente se irá aproximando a quien pueda, visto que la caída de la izquierda y el izquierdosismo es implacable ya puestos en ridículo en plaza pública, el realmente es “de los de toda la vida”. Admito apuestas. Un duro que hace cola en intereco o con Losantos para ir abriéndose camino. Que nunca lo harán trabajando esta gentezuela, la hez es así, dedicados siempre a la cultura: se dedican tanto que no saben ni leer, como su ínclito y tan valorado hermano, que el mismo día que el consejo de ministros aprueba y ordena que todos los motoristas lleven casco, se va a ver la llegada de la vuelta ciclista a España con el casco colgando del brazo, y a la inquisición de un periodista dijo “si, lo llevo aquí” y lo llevaba colgando del brazo: claro, iba a que le vieran a el, a ser en su leyenda personal el ganador de la vuelta ciclista, no podía ocultar su cara, de guapo que se encuentra. Era ministro de Cultura, y en Toledo ante el escudo de los Reyes Católicos lo ordenó quitar de un monumento nacional de 1498 por “franquista” mira si tiene cultura y sabe, el ínclito culto, al que hasta Semprún le hizo burlas siendo su sucesor: un personajillo siniestro, ladino, malo y nefasto, que cuando por lametones lo pusieron de secretario general de la OTAN por orden directa suya se bombardeó una escuela con todos los niños dentro, no quedó ni uno, y en la rueda de prensa dijo que eran “Daños colaterales” y lo proponen para líder carismático del partido del “No a la guerra” y capaz será de ponerse delante de la pancarta, el muy jeta.
Su aportación a la historia contemporánea es ser el primero que hace, elabora y dice y difunde la expresión “daños colaterales” buen currículo ¿lo propondrán los de la ceja al nobel de la paz? se lo merece, hombre, es de los vuestros.
Estos supervivientes vividores de la izquierda, a todos los niveles y en todos los rangos, empiezan a bajarse de sus pedestales de soberbia pública y a arrimarse a “los otros” que al fin y al cabo el mundo los necesita a ellos: es lo que hay y a la gente le gusta, son los daños colaterales de la realidad, ellos, en sí mismos.
1 comentario:
Bueno, para arrimarse a "los otros" no necesitan bajarse del pedestal ¿eh?. Estos ya tienen pedestal honorífico y vitalicio, y deuda de gratitud pública contante y sonante per secula.
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