miércoles, 14 de mayo de 2008

Clon,un bar y la órbita tuerta

La senda está trazada. Desde la Lex Augusta hasta hoy, viniendo de los jardines colgantes de Babilonia que pasaban por las Thermópilas mientras Justine se bañaba en el lago Mareotis y Antinoo se sucidaba en el Nilo por Amor a su patria más que a su emperador, la senda es continua: la senda infinita que simplemente se camina: vamos, llegaremos: jefe la faena está hecha, vuelvo a casa, vuelvo al camino, hasta que cantemos el nunc dimmittis y ahí se acabó. O no. Pero nada somos, y más nos empeñamos en nuestra propia identidad más la perdemos: el hecho individual se pierde en la historia; la persona nada importa, realmente ¿a quien le importa ahora no ya Cervantes: Dalí? tan sólo su obra; lo otro lo llamamos estudio, tan sólo pretendemos asumirnos mejor a nuestra cultura indagando a las personas: que no somos por nosotros sino por la cultura que nos constituye y organiza.

Que ni la hemos inventado, ni realmente la poseemos; más la intuimos y le pertenecemos que la elaboramos.

La expresión mas elevada de las normas de conducta y de la conservación cultural es el evangelio: el resumen, la pauta.

Entra dentro de la normalidad de crecimiento personal inventar el mundo; nada nuevo bajo el sol; forma parte de nuestra educación el asombrarnos de la capacidad del lenguaje para crear la ciencia, y poder entender el mundo con otro idioma que el percibido en el entorno inmediato: pero la ciencia sólo es un método de entender los fenómenos físicos; y por ende además limitada; el estudio nos devuelve siempre a nuestra esencia, siempre falible limitada y definida por el acceso a la máxima entropía y lo evanescente del tránsito: aunque venimos de Babilonia pasando por las Thermópilas, segundo piso, ascensor: Times Square es esquina de la plaza de los Marinos Efesios y mi vecino no es mejor que los íberos excavados: y además, la máxima expresión de la tecnología a fecha de hoy se refleja en los veleros de la Copa América, la navegación a vela es lo más evolucionado; y no es un chiste.

El creer que comprendemos el mundo y que podemos rendirlo a nuestro placer forma parte de nuestro crecimiento; el darnos cuenta de que no, es la maduración. Instalarnos por todo o por parciales en una adolescencia sin solventar es lo válido a fecha de hoy: véase la casta política, y demás engendros en general; queda como afición lo que fué pasión; y vamos progresando, con cierta tendencia a la humildad que se percibe claramente en algunos; se desconoce en la soberbia, se ignora en la progrez: pero que les vas a pedir: no dan para más.

La ciencia es necesaria; se manifiesta en la tecnología, es la herramienta; pero de ello hacer un paradigma de lo humano o asumirlo a una religión, es una falacia per se, además de índole científica: es la incompletitud de Gödel. rendirse a la evidencia implica dos cosas: que se madura como persona despersonalizándose uno mismo asume quien es, y que se ve las cosas con la necesaria perspectiva: negar que nuestra cultura lo es por la religión, obviar eso, relativizarlo o negarlo, es una estupidez; negar las catedrales, es negarse a sí mismos, y ante esa patología enfermiza pueril e indecente, se ha de enfrentar la familia, pero no ha de asumirla la sociedad. Que digan lo que quieran: sólo hay una cultura, la cristiana, que no es casual que el mundo civilizado lo sea por el cristianismo; que no es casual la barbarie y el hambre en el resto.

Siento mucha impotencia cuando se me habla de sincretismos, o de diálogo, o cuando los cristianos se prestan al juego de "comparar" teologías: solo hay una teología, la católica. Lo otro, dejémoslo.

Pero la comparación es otra: mucho más evidente: denme un sitio donde traten mejor a las mujeres que en el mundo cristiano; denme otro lugar donde haya comparables a las catedrales góticas, a Dalí; denme escritores del nivel de Torrente Ballester; denme algo que pueda ponerse "cerca" de Bach. ¿algo comparable a Blade Runner?

Que no sea creyente no implica mi estupidez: quien se instale en ello como una religión sólo manifiesta su estulticia; la sustitución por "algos" es sólo una muestra de debilidad mental.

El hombre lo es porque asume su pasado y se proyecta al futuro: desde la Lex Augusta, a la estación espacial; el hombre lo es para si mismo y por ende para la humanidad: son los progres los primeros que en la historia de la humanidad como generación van a dejar menos herencia de la que han recibido: de victoria en victoria hasta la derrota final, destrozan y no crean: ese es el problema del mundo civilizado, hoy.

Asumamos quienes somos, que si no no sabremos a donde vamos, porque nunca sabremos de donde venimos.

La senda está trazada: el camino nos perpetúa. Avancemos.

4 comentarios:

Luis Amézaga dijo...

Si somos fruto de la cultura que nos perfila, que sea ella la que haga el camino, que a mí me da pereza. La ciencia habla de lo físico, por eso me gusta.

o s a k a dijo...

no es casual que hagas metáforas de corte psicológico ("instalarnos por todo o por parciales en una adolescencia sin solventar es lo válido a fecha de hoy"). Pienso que todos estamos algo de las neuras. Y es grave.

La pasada semana estuve cenando con un amigo de toda la vida y miy pronto me di cuenta de que y no nos entendíamos, porque habñlábamos en planos distintos. Hablaba de remuneraciones, horarios abusivos, de horas extras, de pluses, complementos, pisos, bodas y comuniones,... y cuando intenté ampliar el tema de conversación, cuando le propuse introducir en esos mismos temas la variable que los dota de sentido -él que es cristiano- sencillamente no le encajaba nada. Y quedamos sumidos en un profundo silencio hablado.

Y así pasaron las horas, las tapas, las cañas, y cuando nos despedimos los dos nos fuimos a casa más solos que si hubiéramos cenado solos.

pues no pienso rendirme

n a c o
anónimoporcompasión

Ignacio dijo...

Es que en el proceso de formación os falta llegar a los finales para poder volver a empezar: de modo tal que no teneis los nexos de unión entre la realidad y lo real, lo pensado y la fe, lo teneis todo compartimentado: el proceso quiere que salga la gente asi; en mano de cada cual su formación, pero al sistema eso le funciona

Anónimo dijo...

es verdad

somos piezas del engranaje de una máquina insaciable y embrutecida

y -utilizando el símil pseudo-matrix- nos resulta muy difícil no excretar la basura que la alimenta

esto lo veo, pero estoy lejos de alcanzar "la gran simplificación del niño, con la experiencia del viejo"

n a c o
eladorosadelagalaxia