A love song for a lovely inquisition

Caminito que el tiempo ha elaborado,
que solo un día me viste empezar,
he venido por ir otra vez 
he venido a peregrinar.

Percolando el tango entra el otoño; Roncesvalles asoma como una imagen aproximándose con el frío y la lluvia y el rigor y la gorra las sandalias que aun andan y la misión otra vez, el eterno y frágil ignorante que empezó allá por el siglo IX porque si vas a contarle las penas al santo, siempre pues como que alivia sobre todo si te sabes ya las cosas, que siempre son las mismas desde entonces y no me explico aun porque cada vez son nuevas, hasta los dolores de los tobillos reventados, el frío y el calor, la luz y el sol siempre son nuevos porque siempre se cambian como la ciudad que levita y a cada peregrinación no hay una cuesta ni un dolor ni nada que te sea familiar: por que tu nunca te eres ya familiar a ti mismo porque no eres el mismo, porque sigues siendo el mismo, el niño aherrojado junto al bibel pero ha pasado el tiempo y ha pasado la historia y has conocido y has aprendido si es que alguna vez se aprende algo, cosa que todavía esta por saberse, como si alguien aprendiera como si alguien enseñara como si alguien leyera como si alguien quisiera o entendiera algo que no fuera lo que previamente quería entender, como si fueramos capaces de entender y no encajarnos en la soberbia, y van desfilando pecados capitales, y va y los has coleccionado, y tu tan listo, enterao, que no te enteras, que tu no tienes la culpa, que la culpa es toda tuya entera, que tu lo hiciste o lo sufriste pero es lo que hay, lo que hubiere, lo que llevas y no lo que otros llevan, y no lo que creen que llevas sino la rotunda realidad, que abarca de antes y seguirá después pero alivia la realidad la rotunda realidad: peregrinar es la vida; porque es el eterno tránsito; aunque sigas aquí, aunque te toca quedarte nunca es lo mismo que nunca fue lo mismo ni nunca será lo mismo: anda la gente preocupada por una nueva campaña publicitaria que llaman crisis por la cual los ricos van a forrarse otra vez y algo más a cuenta de los pobres, mediante la extorsión, aunque ahora le llaman consenso, y mediante la Ley de Lynch, a la que llaman democracia; incapaces los inmaduros de salir de su inmadurez ni de su resentimiento siguen queriendo ganar una guera civil con argumentos “la victoria moral es nuestra” siguen queriendo validar un constructo cientifista de la realidad que llaman socialdemocracia, que viene a ser como llamar a a Stalin hermana de la caridad, que consiste en utilizar el estado como herramienta de extorsión, condicionando a la gente a ser siervos de la gleba, arrancándoles del idioma y de la universalidad para que pertenezcan a un lugar, sean de la tierra como los nabos y las garrofas, como la uva y las almendras que me parti la espalda recogiéndolas para que la recua de gañanes de mis alrededores se pegaran la vidorra y me denigraran: la vida pasa, y aquí, el que lo cuenta soy yo: los héroes de la resistencia antifranquista elaboraron sesudos planes contra el franquismo, que de tan sesudos sólo los pusieron en marcha una vez muerto Franco: pues si la realidad no me da la razón, la realidad está equivocada: pero la progrez consiguio algo: la confusíón, el barullo, la algarabía: nada en claro pero con caras de mucho ensayo previo en el espejo y grandes declaraciones que nada dicen, ni nada dirán: nada tienen que decir, nada saben, nada pueden transmitir, solo esquilmar y demás, y hablar mal de otros para que no vean lo imbécil que soy yo.

España ha de librarse de la socialdemocracia repugnante, dejar a los inmaduros cientifistas progres en su progrez asombrándose aún de la composición del átomo que aun no han comprendido desde que Grecia era Thermópilas (a de eso no se habla: es película facha) hasta que Claudio elabora la burocracia para que no abusaran de él, se elabora el mejor constructo político posible, el Senatus populusque hispaniae sería lo ideal: pues nada, a mirarnos en los USA, o en Timor oriental o en las formas de organización de las amebas y los platelmintos, total, la gente viene a ser lo mismo: y patentizan su idiocia, a cada momento. Y todos a buscar su definición, a encajarse en una etiqueta, sea de titulo universitario, de tribu urbana, políticastra, sindical o ambas: no me dejeis solo, nadie quiere pensar solo, nadie piensa por si mismo, pero ya avisó Mark Twain: cuando dos piensan igual, hay uno que piensa por los dos; pero negar la posiblidad del acuerdo es la mejor manera de evitar pensar: la educación, destrozada; la sanidad, un mortuorio del Dr. Mengele, tenemos unos defensores que ofenden y los políticos que nos merecemos: Catilina, Trajano, Adriano, Augusto…pero los tenemos en nuestra historia, y además en la que no se estudia: y quieren sacar esto adelante con soluciones, cuando es evidente que siempre pasan cosas y siempre pasarán, y la vida se sobrelleva con principios y no con soluciones que nadie nunca dió solución a nada, nadie anticipó el futuro ni acertó en previsión alguna, ni a nadie puede sacarnos de ésta: aguantemos el tirón con principios, tengamos políticos con principios, seamos un pais de principios, que lo demas, pasará: el dinero viene y va, pero la gente permanece con sus principios, y aquí ahora los problemas son como hacer para mirarme al fondo de sus ojos, o como hacer que las niñas SEPAN que son princesas para que los chavales las puedan ver así, y ellos se esfuercen en ser principes azules: sea con el ultimo armamento porque hay mucho dinero, sea con espadas de madera, porque no haya un duro: pero eso es la historia y es el hombre, es la humanidad y es la evolución, y lo demás, mariconadas.

Se empieza en Roncesvalles, y a la que te vas a dar cuenta estás en la Puerta Santa, das el parte y el nunc dimittis al jefe, ite missa est, y la realidad espera, otra vez; son tiempos recios: los peregrinos pasan.