miércoles, 3 de marzo de 2010

Atado, y bien atado

Este postfranquismo una vez muerto Franco ya es algo más que ridículo. Es el régimen tan denostado en palabras como alabado en actos: en vez de un partido único, hay dos, así la satrapía se disfraza de “democracia” y siguen adelante: ni el psoe ha dejado de ser lo que siempre fué; gritan mucho cuando son mayoría, cuando las cosas van en contra, duermen: véase la “opresión franquista” donde Willi Toledo habría sido un chivato de la policía, vamos, eso va de soie; Ni el pp deja de ser “la alternancia” que significa: el psoe lo pergeña, el pp lo consolida: porque nada dicen, nada hacen, nada aportan ni nada cambian ni sostienen: tan sólo lo que hay, y nada más que lo que haya: son “responsables” o sea, hay un conchabo de poder que da vergüenza.

La jerarquía de la conferencia episcopal, asombrosamente entra en política intentando ser Cardenales Richelieu sin saber que el modelo ideal es Cisneros y haciendo tonterías que avergüenzan: no entraré en detalles; simplemente están más allá de estar puestos en evidencia.

Los “movimientos” de poner pegas al régimen, están todos en Madrid: en la corte se agrupan y justifican; con una cobardía atronadora: al menos los falangistas se plantaron ante Franco: con su cara y nombre, Torrente Ballester y Dionisio Ridruejo, sin ir mas lejos, Panero, sin ir mas lejos; y todos ellos fueron machacados por el régimen: el que menos, extrañado.

Intereconomía y Losantos y Vidal ejercen un papel que a la gente gusta: piden coherencia y respeto, pero nada dicen de cambiar el sistema sátrapa: simplemente, que funcione “correctamente” y sea coherente consigo mismo: es su gran acierto o error, porque la coherencia del sistema es imposible en su propia naturaleza: la administración de justicia tiene por lema la inicuidad; la educación, la domesticación; la sanidad, el control demográfico; la defensa, es un órgano de represión y la seguridad exterior simplemente está en manos de los franceses: a buen santo se encomiendan.

Quizá hagan falta anarquistas, quizá un partido de derechas: pero aquí lo que todos callan es demasiado evidente: hay que dinamitar el estado del bienestar de algunos, hay que cargarse la enorme tramoya burocrática, hay que fundir en lava toda la algarabía de todas partes, hay que cambiar el sistema hacia la libertad y es todo muy simple,sencillo y fácil: se acabó el recreo, hay que ponerse a estudiar.

Es fácil: por eso a nadie veréis pedir listas abiertas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Vamos, usted está pidiendo a gritos que aparezcan grupos/partidos/colectivos que hagan política, que es lo mismo que pido yo. Esperese sentado y preparado para fosilizarse en la espera. Hoy no hay política, sino marketing electoral dentro de la misma política, y lo más lamentable es que los "ciudadanos" en mayoría aman esta política, o son tan parte del detritus que ni se plantean otra cosa.

No desesperemos. Esto ha de arder, va a arder, y cuando eso pase, haremos política.


meciendocunasanimalpolítico.