miércoles, 28 de marzo de 2007

Galaxia pascual

El domingo lo es de ramos.

Tenía una misión que cumplir, y sabiendo que lo iban a machacar, entró igualmente a la ciudad: ahí me maten. Y lo mataron.

El jueves santo es realmente la fecha más importante para la cultura; la máxima expresión de la esencia del cristianismo; la entrega, el amor, todo aquello que esta ridícula sociedad deplora; todo aquello que los progres denuestan.

Cristo es una metáfora: no explicable a progres: son muy capaces de defender con vehemencia a Cien años de soledad y su valor simbólico a la vez que denuestan con simplezas el evangelio.

Cristo muere, para que todos vivan.

La progrez tibia y cursi: que mueran todos para que viva yo.

Esa es la metáfora y la lección.

Y esa es la esencia del catolicismo.

Y por eso es tan odiado.

Llaman de cualquier manera a los espartanos (y desde que yo estudié) pero la esencia permanece (los partidos, pasan, los principios, permanecen)

Es otra metáfora de la historia; es lo mismo: la entrega, el amor eterno más allá de la muerte.

Todo aquello que las memas, cursis tibias y aferradas al relativismo babean en historias de amor soñadas y representadas en su vida como una opera bufa, el amor, el de verdad, el amor de tus huesos en una fosa común mil años después amando aun.

Sólo mediante la entrega se sabe que fue amor (y nunca que es) en términos humanos. Pero ni como metáfora asumirán que el evangelio acierta: al enemigo ni agua. El odio se emplazó en la sociedad como máxima expresión del mal. Véase el gobierno.

Viene la pascua, llega el renacimiento; no llegamos al nivel de Cristo (yo, al menos) pero es el modelo a pensar ( y no falsos profetas de religiones de fin de semana en hotel cutre) Viene la Pascua y vuelve la vida, a pesar de tanta sombra, a pesar de tanto invierno, llega la pascua y renaceremos, llega la Pascua.

A pesar de ilusiones deplorables, llega la pascua. A pesar de los que se niegan a sí mismos, del follón, del escándalo y de la ruindad del uso de la fuerza por éste estado nazi, Como muestra de la cultura, es la pascua. Para purgar nuestros pecados, a pesar de los ataques, daños y perjuicios, hechos y recibidos, A pesar del rigor que se nos impone, llega la pascua.

Y como hombres que somos debemos asumir la capacidad de amar y no enmascararla bajo formas ridículas de relativismo; cada cual aguante su vela pascual, la deje quemarse y empiece un nuevo año.

6 comentarios:

o s a k a dijo...

precioso mensaje

insobornable

nadie puede con Él

n a c o

[me alegro de visitar un sitio donde se protege así de bien todo aquello que quiero]

Ignacio dijo...

Yo sólo lo cuento

Luis Amézaga dijo...

Creo que este año también le crucificaremos, a ver si espabila, o espabilamos.

AMDG dijo...

Pues para mí es la Encarnación la clave del cristianismo. Lo de la Pasíon fue pasarse un pelín.

Ignacio dijo...

Lo he escrito mal entonces: la clave es la resurreección; si no se ha entendido asi, fallo mio. La pasión sólo es tránsito; la clave está en la resurrección

Anónimo dijo...




n a c o