martes, 28 de junio de 2016

Han votado.

Lo único que sigue asombrándome es la absoluta falta de humildad de todo el mundo. Todos saben cual es la verdad y cual es la dirección correcta, el voto correcto. Cuando no te sueltan que van “en el lado correcto de la historia” lo cual ya de por sí es repugnante.

Todos saben todo de todo, expertodos.

A poco que sepas de algo, los pillas, siempre.

A poco que hayas vivido, ves la trayectoria del vividor F. Glez, que quiere asesinar a los ancianos por serlo, creyéndose que es un chico ye-ye, y es otro anciano, malo, siniestro, pérfido y degenerado, y culpa del voto que no le gusta a los ancianos. Insinúa exterminios.

Los mandamases de Pablemos también han soltado perlas de negación de sectores sociales que son auténticos casos de xenofobia, y esto sí lo es, no el mantra de la propaganda. Los disidentes, al gulag; es disidente todo aquel que no piense lo que yo ordeno.

Napoleón imponía a donde invadía la obligación de la constitución, que era en si una declaración de sumisión a Francia bajo “el lado correcto de la historia” sometía a  pueblos “modernizándolos” nunca tuvo en tan poco tiempo más atraso todo el mundo, que bajo la hégira de 1789, y siguen en ello.

Ahora, a cambiar la constitución es el mantra: más sumisión, el amo nos devorará.

Lo que no dirá ninguno de estos es de cambiar la ley electoral, voto directo.

Que no me cante nadie milongas: ni son republicanos, ni socialistas, ni de derechas ni nada; todos conservadores, a conservar el sistema, y un burdo modo de privilegios, caciquismo, y dictadura, enmascarado en toneladas de propaganda.

Nadie ha dicho de cambiar la ley electoral.

No quieren el voto nominal, hay que elegir entre lo que el amo os diga que debéis elegir.

Y encima la gente se cree que porque lo llamen democracia, es bueno: la peor dictadura imaginable, todos esclavos, y alardeando de serlo.

No hay buenas noticias, excepto para la plutocracia, regodeándose de la estulticia de la gente.

El sistema ha muerto, muere matando, los muertos sois vosotros, y encima los jaleáis.

No hay comentarios: