jueves, 29 de abril de 2010

Creer en el más allá

Siempre que habla José Luis Rodríguez “El puma” es “dentro de tres meses” cuando va a acabar con todos los problemas: como dice Van Orton, somos la envidia de Europa: somos el país que más veces ha salido de la crisis, aproximadamente salimos de la crisis una vez al mes.

Desde que están, todo es por un futuro mejor, futuro que nunca llega: luego, las “superestructuras” de: por un futuro mejor, han inventado hasta la contaminación astronómica, siempre por un futuro mejor, un futuro que nunca llega.

Al menos los católicos saben que en esta vida están aquí, ahora; lo de la otra vida será después de morir; estos creen en su capacidad de inventar el Edén, es lo que tiene creerse superior a Dios.

7 comentarios:

Museros dijo...

Es como el cuento de Alicia en el País de las Maravillas: siempre es "mermelada mañana". Nunca es "mermelada hoy".

Interruptor dijo...

Te tomo “prestada” la frase (link).

Conrad López dijo...

Esa reflexión:

"somos la envidia de Europa: somos el país que más veces ha salido de la crisis, aproximadamente salimos de la crisis una vez al mes"

es digna de vendersela a los del estoloarreglamosenunplis.com.

¿Sabes aquél del "año del hambre":

- pero madre ... ¿cuando vamos a comer pan del día?
- mañana, hijo, mañana.

Ignacio dijo...

Lo de la envidia de Europa es de Van Orton

Luis Amézaga dijo...

Los indicios como futuro.

Embajador dijo...

En vez de "eternidad" tenemos "futuro", en vez de Apocalipsis, "cambio climático" ( o cualquier paja mental neomaltusiana que se nos antoje). Como no creemos en Dios, creemos en Billy Wilder, y nos descojonamos de nuestra ocurrencia y sentido del humor desbordante.

Anónimo dijo...

"somos el país que más veces ha salido de la crisis, aproximadamente salimos de la crisis una vez al mes"

Joé, si es que somos una superpotencia macho, y todo gracias a ZP, no necesitamos ni a Dios, ni voluntad, amor propio ni mermelada ni nada de nada, qué va, si este tío con unas palabras ya lo arregla todo.

Vaya país, vaya gobierno, vaya moralidad. Qué asco.