El planteamiento políico que se ofrece es de una vulgaridad que espanta; propio de los programas de tv que asombran por su bajeza: el juego está definido: tan sólo hay que ganar al otro. Simplemente.
Por eso el pp no quiere ganar las elecciones arrasando -que podría, si fuera un partido de derechas- quieren ganar por un voto, y mantener el sistema, corrigiendo las pequeñas desviaciones sobre las lineas trazadas pero sin modificar ninguna de las líneas trazadas. Ninguna.
El psoe infantilmente cree que acrecentando la figura del enemigo su tamaño es mayor, como crios elogiados, como coquetas alabadas, por eso está haciendo de Aznar una figura mítica realmente: como epítome del gran enemigo lo utilizan porque su juego es el mismo: ganar al otro. En ambos casos por la mínima, aunque a Blanco se le ve que si pudiera ejercitaría genocidios.
Ese es el asunto: vamos a ver quien gana, pero sin mayor importancia para poder seguir jugando, que es muy divertido ¿verdad?
Lo que la gente percibe, lo que yo percibo, es que ya se acabó el recreo, que han sido unas vacaciones demasiado largas y un recreo excesivamente intenso y largo, que toca abandonar el patio, volver a clase, dejar el juego y volver a la vida real.
Porque ya agotados los niños en el patio empiezan a hacerse daño al subir la intensidad del juego.
Así que acabe el juego, vuelvan los púberes a sus aulas, y que los mayores empiecen a hacer un mundo habitable, una España que funcione y un pais que dejar con orgullo a los que vengan detrás; y los mimados sigan bajo las faldas de sus mámás, de donde nunca quieren salir.
9 comentarios:
Las tablas, el combate nulo, benefician al campeón.
Estas no serán unas elecciones normales. Nos jugamos mucho.
Yo no sé que os jugais; y el pp no ha dicho por donde va, me temo que no lo saben pero si sé quien gana pro goleada: la abstención.
Ignacio, mi premio al blog solidario para ti.
Está claro que el P$o€ no organizó lo del 11-M para ahora irse a paseo.
Muchisimas gracas Lujaban; cuando vengas por aquí tienes un cafe pagado inexcusable,de verdad.
Hace tiempo que no creo ni en derechas ni en izquierdas, solo en figurines que agarran todo lo que pueden a dos manos. Muy bueno el símil con la tele. Tan real y próximo a ser revitalizado con debates apañados. Mucho mejor ese mundo habitable que funcione sin más pretensiones que el respeto, la reflexión y la cultura. Amén de unos cuantos pelotazos cuando tercie, que no va a ser todo espetos de sardinas y paella.
Hay que formular una nueva teoría social y política.
Igual es ese el problema, que todos los que llegan de nuevos quieren formular una nueva teoria social y política y quizá se trate de volver a las esencias a la tradición que hasta aquí nos ha traido y ser prudentes y sensatos con ls "novedades"
Hay un chiste clásico para mi que me lo contó la Casa Rusia, un paseo; el chiste sucede en una escuela en Moscu, niños en clase:
"profesor,¿el marxismo es una docttrina científica?
claro, es la unica cientifica.
-"pues podía haberla probado primero con ratas de laboratorio"
No sé Ignacio, yo lo que creo es que quieren interpretar lo que hay arrimando a su fuego la sartén. Los mismos argumentos se pueden usar para decir y contradecir. El grado interpretativo ha superado ya cualquier límite razonable y se instaura directamente en la desfachatez.
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