domingo, 2 de marzo de 2014

Mi padre

A más de treinta años de su muerte, en mi pueblo le dedican una calle.
En un acto diluído en un marasmo variopinto, pondrán una placa.
Hablará alguien, justificarán algo, seguirá la fiesta.
Yo estaré aquí. Siempre estuve con mi padre.
La parte social es evidente: el castillo de Buñol. Apoyado sobre todo por Cano y Ortíz, consiguieron salvar del frenesí urbanizador el castillo de Buñol, despreciando los cantos de sirena del capitalismo rampante que tan bien ruge ahora, entre aplausos, parabienes y adulación.
He pergeñado un opúsculo breve, porque soy la única persona que le conoció y respetó siempre: mi padre murió en mis brazos, en profunda decepción; a más de treinta años de su muerte, aunque se quiera disolver, difuminar, ningunear o menospreciar su obra, hay un pequeño problema: se puede mirar el castillo, y tengo al menos diez mil testigos que vivieron, o son hijos de los que vivieron, lo que en esta obra cuento: al explicarla, muchos se apercibirán por primera vez de la dimensión de lo hecho.
Y lo saco a la hora precisa en que sucede el acto, para que nadie utilice mis palabras, apropiándoselas, para luego intentar despreciarme, ningunearme, minusvalorarme y medrar con mi trabajo, que hay demasiado aficionado a “poner en valor” el trabajo y esfuerzo de otros.
Darle el nombre de libro sólo es para el trámite del registro de la propiedad intelectual, que de tan evidente que es todo, sólo al leerlo la mayoría de buñoleros comprenderán la grandeza de tal obra; además apunto parte de los problemas que yo he estudiado y conocido, analizado y guardado, que dado el caso, publicaré, o no; pero doy las pistas sobre las que pueden asentarse demasiados estudios; harto de que me copien, al menos deberán citarme.
Por supuesto, en respeto y homenaje a mi padre, el libro es gratis.

Buñol Castroforte

Embarcado Dantés, el Pequod está listo a partir. Pueden ustedes llamarme Ismael.

3 comentarios:

ZP Nunca Mais dijo...

Me queda la duda del porqué entregaron el castillo al ayuntamiento.
Tu padre, sin duda, una excelente persona. Enhorabuena.
Que después de más de 30 años de su fallecimiento se acuerden ahora de él para dedicarle una calle... estas cosas solamente pasan aquí en España.
Saludos

Ignacio dijo...

La asociación tenía eso como objetivo fundacional: y lo cumplieron.

Sergio Tomás dijo...

Hola Ignacio, lo dicho, me encantó lo que leí hasta ahora, y mucho la manera en la que describes Buñol recurriendo a los canales de agua que lo atraviesan, me parece precioso, y hasta me dió por pasearme por Buñol, con el google maps, jaja. Muy bonito, ¡muchas gracias! Sergio.