viernes, 4 de mayo de 2007

Seso

Apresado junto a fray Domingo de Rojas intentando atravesar la frontera de Navarra, Carlos de Seso intentó justificar su viaje: no coló ante los alguaciles de la inquisición.

En el oscuro proceso a Carranza, en la sugerente España de la inquisición tras el concilio de Trento, Carlos de Seso demuestra ser un progre. De todo habla, fundamentándose en que "conoce a…." o esto" se lo ha oído a…" lamentablemente para él, su ignorancia revestida de empaque, pompa y circunstancia y la suficiencia lo llevaron a la cárcel de la inquisición. Y no se le ocurrió hacer huelga de hambre, mira.

El problema es los asuntos teológicos que separan protestantes de católicos, el problema real es apiolar a Carranza en pugna por el poder del inquisidor general Valdés. De los elementos teológicos, Seso asegura de la teoría que propaga

"oírla en Italia predicar y engrandecer el beneficio y muerte de nuestro señor, y haber hablado con los predicadores que predicaban, y que esto lo oyó en Verona" Preguntado si la había leído en obras heréticas de Alemania repuso que "no se acuerda haberla leído en estos libros" Resulta clara la procedencia italiana y no alemana de las inquietudes teológicas de Seso.

O sea: se monta una composición de la realidad por lo que oye de aquí y de allá; como pepiño blanco, que tiene una gran cultura basada en haber pasado su vida leyendo los sobrecillos de azúcar de los bares.

Carranza lo había escuchado, y no lo había denunciado porque creía que remediaba un alma de su ignorancia; no le dio importancia, pero él si se la dio a sí mismo.

Consiguió medrar hasta ser corregidor; consiguió ser perseguido por la inquisición, consiguió levantar la suficiente polvareda de palabrería, medias tintas, equívocos y progreses como para enturbiar el proceso a Carranza y levantar liebres para la denuncia y la delación.

Consiguió que el inquisidor Valdés en su lucha personal para destronar a Carranza tuviera elementos para apoyar su inquina personal; consiguió engañar a muchos, consiguió medrar un poco; lo pilló la inquisición.

¿Cuántos Seso tenemos hoy por aquí?


-Si os interesa el tema, decirlo y desarrollo más el asunto,. Para mi un placer, no lo hago por no agobiar.

5 comentarios:

Piru dijo...

"...tiene una gran cultura basada en haber pasado su vida leyendo los sobrecillos de azúcar de los bares."
Si es tuyo, te felicito, porque es buenísimo. Se me representa el típico detective o sicario de los bajos fondos de Chicago-años-30.

Juan dijo...

En los grafitis de los urinarios también hay mucha cultura de la que él hace gala.

¡Grafiteros al poder!

Juan dijo...

Nunca viene mal una ración de Historia entre tantas raciones de comida basura que tenemos hoy.

Es una buena idea, Ignacio.

Ignacio dijo...

Os la iré contando a peuqeñas dosis, no causa mucho entusiasmo aunque para mi es apasionante

o s a k a dijo...

a un módico precio, supongo...


n a c o