martes, 7 de abril de 2009

Cristo echó a los mercaderes del templo.

Tal vez el vulgo aun crea que los jueces “no tienen medios” y que “les faltan ordenadores” los más listillos dirán de “bases de datos” y todos tan contentos: lo que cobra un empleado del sistema judicial es indignantemente obsceno, del primero, al último; y por supuesto, ninguno lo vale.Han colocado como ladillas incrustadas a psicólogos para dar a la progrez más dinero de la gente, sin mediar examen ni oposición, sino tan sólo estulticia y estupidez y si quieren que me crea que un asesino sale de la cárcel por un error de una base de datos, conmigo han dado en hueso: conmigo, y con unos cuantos mas.

En hacienda si funcionan los ordenadores. El duque de Ahumada es muy divertido; y fácilmente hackeable.

Si la administración judicial no funciona, es porque interesa que no funcione: gente de secta, endogámica, putrefacta, corrupta, y esencialmente inculta: cualquier día juzgarán como memoria histórica la crucifixión de Cristo, y lo volverán a condenar, apuesto algo: la conferencia episcopal española se presentará como acusación particular: no me cabe ninguna duda.

En la universidad politécnica de Valencia hay unos quince catedráticos que yo pueda dar nombres y datos que no tienen el bachiller elemental; y esto es demostrable; eso si: los viajes a Cuba y otros sitios para degenerados sexuales se pagan religiosamente como”investigación” antes, se llamaba ir de putas. En la literaria, mi educación clásica me impide decir el tamaño de la estulticia. Pero otro día me explayo.

La naturaleza de la cultura es más amplia y compleja en su desarrollo que la estulticia del materialismo histórico y la dialéctica de los opuestos: es un sistema que sirve para degradados cerebrales, gente con la adolescencia por resolver, enfermos sexuales y sobre todo envidiosos.

La realidad impuesta que pasa a la historia no está en la prensa escrita, ni en los medios afectos al poder sátrapa de la repugnante socialdemocracia: la gente en la red está ya organizándose para ir al congreso de los diputados a sacar a pedradas a toda esa gentezuela: ante semejante animalada, sólo puedo estar en contra: también hay que ir a los parlamentos autonómicos, alcaldías, organismos oficiales de todo tipo, universidades, conferencia episcopal, y a los sindicatos y liberados: vale tirar piedras, pero siempre y cuando su diámetro garantice al menos seis años de hospitalización……en la seguridad social que ellos han defenestrado; así, comprenderán lo que la realidad oculta.

Todo el colaboracionismo con la repugnante socialdemocracia ha de ser directamente arrojado a la ciénaga de la infamia de la historia por la gente. Y está para suceder.Como la violencia hay que detestarla “venga de donde venga” tan sólo les animo a que las piedras sean de buen calibre y que apunten bien.

Porque eso lo ganará la humanidad.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Estos pobres imbéciles no han aprendido nada de la historia. Al final, al patricio y al senador, el germano llamó a su puerta. Lo acompañaba un romano venido a menos, cargado de una hostia que asustaba al propio bárbaro.

El problema es que mientras el pueblo se cabrea y limpia a pedradas la escoria de un sistema, aparecen los portunistas, los rousseaus y los robespieres de turno para ir canalizando esa ansia de pulcritud hacia sus posiciones.

Así, mientras el pueblo francés hacía lo único que realmente valía la pena ( Darle salida a un producto para descabezar puros), otros los usaronpara medrar....y de aquellos polvos, esta mierda.

Que tiempos más interesantes nos esperan. No se quien se atrevió a formular aquello de que estabamos ante el fin de la historia, pero si hay algo de lo que no me cabe duda es que el siglo XXI va a ser el más bonito, apasionante e interesante de los siglos que se estudiarán en un futuro. Es lo que tienen los siglos donde Marte se pasea triunfal y lo convierte en su exclusiva casa.


Me pido la piedra de la derecha.


Meciendocunas

Ignacio dijo...

El del fin de la historia es Francis Fukuyama.



Yo no estoy libre de pecadoi ni nada de eso, pero que los templos los gestionan mercaderes, que son un comitre central de un partido y demá sta mas que claro; salían de partida con mi respeto y han hecho denodados sfuerzos por perderlo.