Los martes parusía

Premaduros, valoran la inteligencia en la medida en que se ven reflejados: si lo entiendo es inteligente,si es del lenguaje que me conforma es inteligente, aunque no lo entienda; si no lo entiendo es malo o digno de ser aniquilado.

En esa estructura de pensamiento por soberbia y autoadoración no cabe el error ni el fracaso; ni ante la evidencia arredran: despistan, sacan la inquisición, los condones del Papa y cualquier argumento; gritan se van dando un portazo, pero ni ante la evidencia se dan cuenta de su error, ni lo asumen, ni en público ni en privado. Y eso les sube el nivel de autoadoración, que jamás reconocerán un error.

Y ante la apabullante realidad caen en la esquizofrenia: el mundo no me hace caso,con lo maravilloso que soy; me insertan líneas de código abrupto en el cerebro para dominarme; hay algo oculto que me acecha…… hasta que alguna revelación hace que por condescendencia “deje pasar”,o consienta, pero con mis matices…. nunca asumiendo un error.

Así ahora ya no se escucha hablar mal de los liberales ni de los conservadores; en persona dicen que algunas cosas están aceptables….lo que era vehemencia apasionada contra todo lo conservador o liberal, ahora es condescendencia  “hay que poner un cordón sanitario…” que ya ni se dice ni se argumenta ni es tema de conversación: por su parte el pp se ha puesto el cordón al cuello a modo de horca: y no es casual ni un fallo; que La Pastor votara contra los intereses de los votantes del pp no es casual: hay una trama en la satrapía y van moviéndose conforme a intereses. Y cada cual tiene los suyos.

En este momento, lo que pasa por las cabezas de la satrapía sólo es su propia perpetuación: dan vueltas en círculo, y a sus seguidores además de desconcertarlos los insultan; la progrez empieza a ser benevolente al liberalismo; la gente de derechas no van a votar al pp ni de casualidad.

Ahora se desatan muchos males y enfermedades, problemas espirituales y la parte mas oculta del ser; en las calles se nota; en todo se nota, que la bajeza y la hez hacen ley: porque si yo soy ministra es porque soy divina y si no se ni el problema ni se me ocurre nada, tan sólo manipulo lo que puedo para ser mas guai ante mi espejo mágico de anoréxica: la Salgado ahora subirá los impuestos del tabaco, del alcohol, por “el bien común” y jamás reconocerá su inopia; Rajoy y todo el pp harán alardes de lo bien que lo hizo Aznar mientras ellos van enseñando plumeros infames y montones de estulticia.

El cuento de el fin del mundo lleva desde el casquete polar, el fenómeno de niño, el calentamiento global, el enfriamiento global, el temor del año mil, los cálculos que no salen sobre cuando se acaba el oxígeno,que nunca son fiables porque son falaces; lo importante hace mucho tiempo dejó de ser la verdad, o disfrutar o la ciencia y el desarrollo sino enredarse en una murga, a ver quien la dice más gorda y tos p’alante; y eso evidencia estulticia,individual, y social.

Ahora la gripe, luego vendrán las uñas de los pies, pero cada poco tiempo estos profetas decretan un fin del mundo,y la gente reacciona como plebe: es lo que son.