2008/2

Enrocados en su propia estupidez, yendo en una dirección todos y al grito de "a ver quien la hace más gorda" están haciendo el más espantoso de los ridículos, y aunque todos son iguales, entre ellos se denuestan cruelmente: los que lo vemos, vivimos y pagamos, nos hace de todo, menos gracia. La gente cada vez más  consciente de la memez establecida deplora el estado y clama por un reventón del sistema, que a ser posible se los lleve a todos por delante: no habrá lágrimas interminables, seguro: el Santo cuerpo iluminado va abriéndose camino en el horizonte,a pesar de esta banda de aburridos cursis lelos relativistas e infraseres en general, capaces de adorar a un locutor de radio, incapaces de enfrentarse a la summa theológica; elaboran divinidades infalibles, dioses hinchables y religiones de alta infalibilidad engañando a los demás para engañarse a sí mismos: cualquier excusa es buena para desarrollar sus memeces,