miércoles, 20 de febrero de 2008

Elucidando: elucidado

La blogosfera antizp tiene una indignación estos días: coinciden todos en decir "ellos son los fachas" refiriéndose a los ataques que sufren los políticos que no son progres oficiales, con mayor o menor acierto.

Ese es el error. Y por parte de los otros el gran acierto.

Asumir a un grupo indefinido todos los males del mundo, y nombrarlo: "los fachas" como gran entelequia, es un gran acierto de la izquierda: el conseguir que los que no son comulgantes con ellos utilicen su lenguaje es haber vencido: de ese modo, en el inconsciente queda la palabra y el concepto establecido: la democracia es la democracia socialista; y los malos siempre son "los fachas" y si a  la socialdemocracia blandengue que representa Rajoy y el pp conseguimos asociar "los fachas" nos aseguramos la inexistencia de una opción de derechas, de una opción liberal, de una opción democristiana, que es lo que realmente demanda a gritos la sociedad.

Y además la derecha en España nunca ha sido Fascista. Existió la Falange, y hoy día lo de falangista no insulta a nadie.

Pero no son "Fachas" los que amenazan y revientan mítines. Son comunistas. Y además lo hacen bien: según su manual, el guión se desarrolla adecuadamente.Y además consiguen lo más difícil: que los contrarios asuman el lenguaje comunistoide como propio. Así, va la cosa progrecesándose.

No son fachas, ni actúan como tales. Son comunistas. Y, obviamente, esa palabra es un insulto.

Es el problema del uso de la palabra en gente lega.

Ya se ha tratado demasiado en la Galaxia sobre el lenguaje como definición, y como arma arrojadiza contra la propia sociedad; pero de eso el definitorio es Gambra: sin ambages ni medias palabras pone a la luz la estrategia. No fué mal discípulo Stalin de Goebbels ¿o era al reves?

Es León Blum el que lo dice con claridad: dado que como socialistas somos la raza superior, debemos imponerlo.

Mientras los votantes del pp no asuman que usar su lenguaje es darles la razón, e ir cediendo a pequeños pasos; mientras no se ponga en evidencia la realidad social de España y no esa paranoia que es el "socialismo real" y en la realidad lo que hay en España es Socialdemócratas, liberales y democristianos; mientras se siga llamando fachas a los comunistas, y ser comunista no sea despectivo, van avanzando en sus objetivos.

La derecha en España debe emerger, aflorar y mostrarse. Si no, el clima de tensión que quieren mantener para crecer en su avance, y luego pequeños pasos atrás que dará Rajoy, hará aflorar una gran tensión.

¿O es que alguien tiene problemas en que haya gente de derechas en España?

La realidad se degrada, porque se degrada el lenguaje y su uso y debemos empezar a ser escrupulosos con ello: menos relativismo de no decir culo pilila o joder, sustituyendo por "hacer el amor" y demás memeces: llamando a las cosas por su nombre, se ve mejor lo que son.

Lo demás, relativismo. Y eso es letal para la cultura. La única, la occidental, cristiana, desde Pericles (por lo menos) hasta Torrente Ballester (de momento)

Y solventar socialmente la inmadurez de una generación de niños mimados del franquismo nos está costando la evolución a España: han conseguido llegar a viejos sin haber sido jamás adultos; pero no podemos hundirlo todo para que ellos se autojustifiquen en su carencia de inteligencia, su falta de madurez y su ignorancia recrecida: que es la soberbia, que es el mal.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Vale con llamarlos izquierda radical y asesina?

Anónimo dijo...

completamentede acuerdo. JV

Anónimo dijo...

Ser de derechas es y será durante mucho tiempo un estigma. Quizá producto de nuestra curiosa guerra civil en la que los vencedores acabaron convirtiéndose en vencidos. El discurso que estableció la separación entre buenos y malos se ha repetido tanto que ha terminado por imponerse. Es un lastre que no se eliminará tan fácilmente. Paradojas del lenguaje y de la vida misma.

Clarice

Ignacio dijo...

¿mande?

Anónimo dijo...

Ignacio: certero, exquisitamente certero. Como siempre.
Zugarramurdi.

Anónimo dijo...

Tiempo hacía que no leía algo tan lúcido y tan preciso. Cada vez más, más que la coincidencia o no con mi propio pensamiento agradezco el rigor intelectual. Gracias, pues.