jueves, 24 de noviembre de 2011

Hermeneando

In rigore, ut jacent: así había que calificar todas las frases de Carranza según el Inquisidor general Valdés: de esa forma, no hay manera de que nadie escape a la condena: el asunto era condenarlo, no establecer una ortodoxia, era acrecentar el poder del Inquisidor, por el medio que fuera: no era hereje, pero el poder cometió una injusticia; su preocupación era que los inquisidores fueran canonistas,que no teólogos: de éste modo se aseguraba una adecuado funcionamiento del aparato burocrático del que se servía, nada que ver con la teología, la fe, o el catolicismo, sólo ambición, sólo codicia.

Toda la reflexión que dicen estar haciendo los del psoe sólo va referida a la pérdida de poder y como recuperarlo, en ningún momento se plantean un fallo personal, un error de concepción, un fracaso real o un planteamiento erróneo de todo: no; lo importante es el poder, la excusa sólo es eso.

El pp va a gobernar; a todos alivia, la estulticia demostrada por el psoe rozaba ya el más allá del insulto personal y han lanzado a sus huestes como las SA del ejército hitleriano a montar follón: la chusma siempre lo es; esto me va a costar mucho asumirlo, pero la chusma, gleba, hez, populacho y demás opciones acaban siempre sirviendo al amo, y creen que están ejerciendo su derecho o que piensan por sí mismos: esclavitud sumisa y agradecida, la mayor degeneración de la persona en su concepción. El pp va a gobernar: en un momento de delicadeza extrema, hablan de un gobierno “tecnócrata” que no político: precisamente lo que hace falta es política, si tienes principios llegarán las soluciones, sin principios sólo eres una marioneta: los empleados con manguitos de la oficina siniestra de La Codorniz; no necesitamos obediencias al sistema, sumisión y deberes bien hechos; necesitamos replantearnos el sistema entero, parar, reflexionar y volver a los principios, y desde ahí vendrán las soluciones: todo lo demás sólo son caldeamientos de reuniones de indocumentados, aburridos y prepueriles.

La concepción a hoy de la realidad es que todo el esquema político de España, hoy, es para el psoe autojustificarse ganando en Andalucía lo que han perdido para poder satisfacer sus egos y creer que remontarán: el psoe ha muerto, que lo asuman. La concepción, hoy, del pp es no hacer nada para ganar en las elecciones en Andalucía y lo demás ya lo irán resolviendo: saben que son los preferidos de la maestra, que siempre van bien peinados al cole y se sientan correctamente, lo demás es ir haciendo los deberes conforme se los pongan.

Porque si hicieran política, controlando los presupuestos que ahora controla el pp en regiones y ayuntamientos empezaría ya a poner en marcha los recortes, de abajo arriba: cuando hayan tomado la investidura ya aplicarán a nivel nacional; pero no: da igual que todo se hunda; ponemos cara de circunstancias preocupadas, y a esperar, y cuando mandemos en todo haremos lo que nos dé la gana: eso sí, siempre con la aprobación de la maestra, los muy pelotas. Si es urgente se empieza por donde se puede, no por donde se podrá; lo demás, cuentos. ¿O asumimos verazmente que somos reinos de taifas?

No hay política en España, sólo hay reuniones agrupadas de intereses bajo conceptos difusos para engañar a la gente: la cosa cambiará, el cambio se está gestando ya en la red, y nadie espera lo que ha de suceder, pero sucederá, y memeces y apariencias serán segadas por eficacia y principios, porque ya está bien de jugar con la vida de la gente.

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