domingo, 25 de octubre de 2009

Pedagogía socialdemócrata

Se piensa que el problema actual de policías vendidos, jueces vendidos, trajes y políticos vendidos, periodistas vendidos o patéticos o todo junto; la gente tiende a pensar que “se ha fallado” al estado.

Y eso es un error. Es una traición, a la nación.

La nación es España. El estado es la forma que tiene la burocracia de organizarse para extorsionarnos con impuestos y amenazas, con inspectores de hacienda y policías corruptos.

Aun así, si fuera gente que trabaja para el estado tendría un pase, como lo tenían los que trabajaban para el NKVD y los nazis: la obediencia debida. Aunque su validez ya se clarificó en Núremberg, vamos a darla por valida, va.

En España no es una cuestión de Nación, ni de Estado: por eso Garzón y demás de la audiencia nacional no son procesados por alta traición, que es lo que les pasaría en su ideal pensado.

El problema de España no cuenta: toda esta gente, toda, buscan el actuar conforme las normas y necesidades del partido, y nada mas: nada que ver con mayor ideal que el partido, ni estado, ni nación, ni personas ni nada: el beneficio del partido.

Como la más horrible de las sectas.

2 comentarios:

ZP Nunca Mais dijo...

Cuanta razón tienes

o s a k a dijo...

pues sí, la palabra Estado es una de las claves para entender el fenómeno de alta traición que viene dándose en España desde hace décadas: una de las máscaras perfectas para despistar a los titulares de la nación y que se peleen por las migas

n a c o
comopalomas