El concepto de ser humano se pone en entredicho para justificar la ley del aborto: para justificar de paso un montón de jaleo a favor y en contra, confusión, y miedo.
Si realmente el pp estuviera contra esa ley, es tan simple como llevarla hasta sus últimas consecuencias: si no hay ser humano hasta después de nacido, en ese caso en la sanidad todo lo referido a partos y embarazadas no es necesario: se desmontan esas unidades de la sanidad pública y eso nos ahorramos: el que quiera tener hijos, a la privada.
En ese momento todas las demagogias se echarían a la basura: pero como la sanidad está transferida, no lo harán en las comunidades donde mandan, porque lo que les interesa es que se discuta las cosas, no hacerlas ni llevarlas a cabo.
Eso sí: la confusión cada día más alentada, pero dar firmeza y coherencia no ¿imagináis la que se liaba si por el mismo razonamiento se quitaban esas unidades de la seguridad social? en ese momento todo el constructo, a favor y en contra, montado con esa ley se vendría abajo.
1 comentario:
vivimos en el absurdo. O nos quieren arrastrar cada vez más a él. Un argumento inteligente, Ignacio.
n a c o
panycirco
Publicar un comentario