En el anuncio, cuando el jefe aún no ha llegado, la secretaria le pone en su mesa un producto que le ayudará a su digestión: a los días, el jefe, cambia de cara y aspecto y está alegre y risueño, y solícita la secretaria sonríe displicente en el anuncio mientras suena la publicidad: asume no sólo que es secretaria sino que en su mano está el cuidar al jefe “maternalmente” con su instinto femenino y todas esas cosas: así llevan a los niños a la droga, por cierto.
Trasluce el enorme poder de la secretaria el anuncio: gracias a ella todo funciona correctamente, hasta el intestino del jefe, ella es un poder en sí mismo, cuidado con las secretarias. Es el papel profundo de la mujer, tal cual lo ve el anuncio, tal se trasluce.
Una Sra. Asténica y con cara de disimulo de su mal humor presentó los presupuestos generales del estado y se queja de que le riñen porque es mujer y yo lo valgo. Es feliz: ha llegado a ser secretaria jefe, o secretaria mayor o algo así: ese es su anhelo oculto.
1 comentario:
le faltó acusarle de abuso a menores
n a c o
manipulaciónalpoder
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