miércoles, 23 de mayo de 2012

Sigo a la procesión con un acha de cera.

El inquisidor general Valdés para cercenar toda posibilidad de herejía controla todas las editoriales y librerías y prohíbe la importación de libros del extranjero: para evitar el mal de la herejía, casualmente se hace con todo el control editorial de España: publica quien él quiere, lo que él quiere. Con bastante menos acierto, Camilo José Cela se hizo censor con el régimen del cual luego renegaba: así controló que no publicaran quienes escribían mejor que él, y se garantizó jugosas ventas al ser sus libros de obligatoria lectura. Todo lo hacen por nuestro bien.

A ambos lados del espectro político, que son el mismo sin que quepa duda, y sin la queja de ningún intelectual ni héroe autoproclamado de la libertad siguen aplicando el experimento de la rana queramos o no, porque si ha funcionado ahora va a funcionar, y desde luego su longitud de onda mental no les da para inventar nada: sólo copiar y destruir:

El Consejo del Audiovisual de Cataluña decidirá quien puede difundir información por internet de la misma forma que lo hacen las televisiones y radios mediante las frecuencias de radio. Servicios como YouTube o la simple emisión de un podcast tendrán la supervisión de los poderes públicos.

Se creen los mejores, los más progrecesados, y tan sólo son la coartada para ir contra las personas, contra la libertad. Avisados estábamos, apenas se ha tratado el tema en éste lado de la galaxia:

odian, porque temen porque son tan burdos que son incapaces de encender un ordenador y el miedo les lleva a la ira, al odio: a todo menos a estudiar y esforzarse. Todo sea porque la gente no sea capaz de discernir y actuar a su albedrío, no sea que la gente piense y dejen de ser hooligans de uno u otro partido y empiecen a pedir cuentas

 

les convoca el gobierno y so promesa de becas y subvenciones, amén de una dirección general que ya sabemos quien se postula y una “academia de internet” en la cual se ven todos, venden la libertad y a la gente, con listas enteras de blogs que hay que cerrar: si lo sé, dan nombres, insinúan, y como saben ellos más que nadie quieren decidir por dónde debe ir la red y están dispuestos a sacrificar algunas de las cosas que dicen “por un bien mayor” porque realmente internet  necesita una vigilancia que si no la gente va muy perdida; se hacen maestros, profesores universitarios y lo que sea a sueldo del estado para propagar la estrategia y domesticación preludiada por Gramsci, pero se encuentran intelectuales; escriben memeces con mucha pompa y circunstancia y en los órganos de propaganda del régimen acuden como grandes escritores e intelectuales; se insertan en una trama de intereses y se llaman artistas;

 

Han decidido “actuar” en la red, y sólo han engañado a cuatro pazguatos que creyéndose gurús de la red por saber usar cuatro programas acudieron perdiendo el culo a la llamada de la ministra: se reunían mucho y mucha algarada para que el gobierno se salga con la suya: colaboracionistas.

Ya están en evidencia todos los que querían y quieren medrar acerca de la ley nazi que quieren perpetrar contra la libertad en la red; nada es de extrañar: temen a las personas, necesitan rebaños y  cada vez hay más evidencia de su inopia y ceguera: engañan, claro, pero cada vez a menos gente. Y jamás controlaran la red.

Fuera del sistema sólo está la blogosfera, y la temen, porque la verdad no está en las tv ni en la opinión inducida desde los medios: la gente ya analiza, ellos solos, desde sus argumentos, y aquí andamos la blogosfera siendo el ágora.

2 comentarios:

Váitovek dijo...

Te corrijo dándote la razón en unos de tus principios ( a saber, nadie ha visto jamás a las "fuerzas", al "sistema" y demás dioses sublunares, sino a las personas, que hacen o dicen esto o aquello): La mayor parte de la blogosfera está formada por conventículos de fieles a esto o a lo otro o a éste u otro súper Narciso. Acabo de tener una pelotera en "desde el exilio", tan de la "liberté" ellos, porque uno de los acólitos habituales ha pedido formalmente que expulsaran del blog a otro porque no "debatía según las reglas", toma ya!.
Bueno, pues silencio abrumador, negación de lo evidente, insultos, etc.
Ya lo sabía. Sé muy bien a qué liberté defiende desde siempre el liberalismo - la de la aristocracia esclavista de toda la vida de Dios- , pero convertirlos en acto en un atajo de Savonarolas espumeantes y ver al moderador organizar una farsa a lo procesos de Moscú, en un instante, a todos esos "champions of freedom", ha sido muy muuuy agradable. Un auténtico placer.
Como tú dices siempre, quién es quién - personas-, es lo único que hay. Y la "blogosfera" no escapa a éso.
Por no hablar de la desconocida pero ya ingente actividad en la misma que realizan toda clase de agencias de inteligencia y demás gente maravillosa.

Anónimo dijo...

Sigo la procesión con un hacha de cera... he recordado a Golpes Bajos.