Pan con aceite y sal

Se mantienen las salinas en Torrevieja; el aceite este año se ha recogido por debajo del precio de coste; el trigo en Castilla es ya testimonial; a pesar de la Salgado que quiso prohibirlo, aun se produce vino en España: es lo único.

Si te quedas sin un duro, el pan con aceite y sal es el recurso universal: pues ni eso. La modernización que hicieron de España los cachorros subvencionados del franquismo bajo el gobierno de F.González empezó dejándonos sin industria: sin Pegaso ni Avia, Ni Barreiros ni Derbi, ni Bultaco ni Montesa, ni…. le llamaron “reconversión industrial” necesaria para converger con Europa; convergencia que tras poco tiempo nos dejó con una ganadería testimonial de manera que hasta el Jabugo se está resintiendo: olvidaos del jamón, los chuletones se importan. Lo de la pesca también es sangrante.

Eso sí, somos muy modernos y muy democráticos, multicultis y aquí ya hasta los perros ladran en inglés: no cites a Santa Teresa, la confunden con la Madre Teresa, ni cites a los clásicos: no los reconocen. Pero saben inglés, se llama sumisión al imperio; no asunción cultural de lo bueno sino sumisión y abandono de lo propio como humillante rendición preventiva ante una presunta modernidad degradante.

Bombardeados en un piélago de números sin fondo y cuentas imposibles, entregados a la plutocracia de la secta financiera, no importan las personas sino la “productividad” sólo eres persona según produzcas para el sistema y te calles, vistas como dictan unos sanedrines ridículos.

“Convergencia con Europa” Italia mantiene Armani, Ferré, Fiat y Valentino, Ferrari y Masserati; Alemania BMW y Mercedes; Francia además de haber crecido en agricultura y ganadería mantiene Peugeot y Citröen; Inglaterra Jaguar y Rolls, y toda su industria de sastrería; “Convergencia con Europa” ha significado el entregar España a los intereses espúreos de la plutocracia y convertirnos a todos en esclavos sumisos, fieles y acomodados en la indolencia y el abandono, mediante la ingeniería social más antigüa: dividir todo y confundir, que todo es confuso.

Lo primero de una nación tal España es que aquí no le falte de comer a nadie, aunque sea pan con aceite y sal, no satisfacer las necesidades de la plutocracia financiera entregados a codiciosos, plutócratas y demás soberbios que encerrados en su secta ignoran la realidad, porque ellos son modernos y estudiaron en USA y por tanto saben “la verdad” verdad que nunca contempla que la gente haga su vida con trabajo y decencia.

Si hemos de pasarlo mal lo pasamos, todos y saldremos de ésta, estar en un piélago de números sin fondo sin significado alguno es un juego de diletantes snobs que además desprecian a aquellos de los cuales viven con una soberbia y prepotencia impropia: lo llaman democracia.

Y todo con estrategias sociales que funcionan: la murga que nos han dado con el tabaco empieza ya con el alcohol, ya no tan silenciosamente, y con esa murga se despersonaliza a la gente en base a una socialización vaginista enfermiza y degradada: adelanté la manera hace años en La realidad fractal: a veces lamento acertar, pero acierto: no bebáis por “la imagen” vestid como os digan “por la imagen” y ahora actuad conforme al siguiente dictado por “la imagen” que mientras tanto, seréis animales bien amaestrados que obedecen al amo con adorada sumisión y entrega.

Da mucho asco. Es la anatomía de la destrucción.