sub infra

Buscan un afán de protagonismo que creen merecer: hay un punto maravilloso frente a la pantalla del ordenador y se creen la miss que jamás fueron, o la reina de un baile que jamás existió, el escritor bohemio que se sueñan ser o el gran seductor: lo intentan y la realidad les niega, les devuelve su propia imagen ridiculizada, porque es lo que son, ridículos, y confunden la educación con una sumisión abyecta, y creen tener una legión de seguidores asombrados de su ingenio en facebook, de su belleza en las páginas de ligar, y que manejan con eficacia a grandes masas: la realidad les niega un éxito que en su cabeza viven, y claro, al ser inasumible, la culpa es de alguien y hacen el imbécil: no son personas, son el spam de la realidad y la red se ha llenado de eso. La culpa siempre la tiene otro, siempre hay un sueño que no se cumple porque tu no has cumplido la parte que te habían otorgado. Basura, y la red demuestra que la realidad está llena, el gran intelectual copiando blogs, los opinadores dando mis argumentos, los autoproclamados grandes intelectuales copiando enteras mis novelas pero “intelectualizadas” tesis doctorales firmadas con textos míos, gente que no tiene luz propia pero lucen su mala sombra, gente divina que al salir a la luz demuestran ser infrahumanos: condenan a los demás al aislamiento social, porque la maledicencia la dominan, pero son basura, infraseres, spam.