1. Principio de simplificación y del enemigo único. Adoptar una única idea, un único símbolo. Individualizar al adversario en un único enemigo.
2. Principio del método de contagio. Reunir diversos adversarios en una sola categoría o individuo. Los adversarios han de constituirse en suma individualizada.
3. Principio de la transposición. Cargar sobre el adversario los propios errores o defectos, respondiendo el ataque con el ataque. "Si no puedes negar las malas noticias, inventa otras que las distraigan".
4. Principio de la exageración y desfiguración. Convertir cualquier anécdota, por pequeña que sea, en amenaza grave.
5. Principio de la vulgarización. Toda propaganda debe ser popular, adaptando su nivel al menos inteligente de los individuos a los que va dirigida. Cuanto más grande sea la masa a convencer, más pequeño ha de ser el esfuerzo mental a realizar. La capacidad receptiva de las masas es limitada y su comprensión escasa; además, tienen gran facilidad para olvidar.
6. Principio de orquestación. La propaganda debe limitarse a un número pequeño de ideas y repetirlas incansablemente, presentarlas una y otra vez desde diferentes perspectivas, pero siempre convergiendo sobre el mismo concepto. Sin fisuras ni dudas. De aquí viene también la famosa frase: «Si una mentira se repite suficientemente, acaba por convertirse en verdad».
7. Principio de renovación. Hay que emitir constantemente informaciones y argumentos nuevos a un ritmo tal que, cuando el adversario responda, el público esté ya interesado en otra cosa. Las respuestas del adversario nunca han de poder contrarrestar el nivel creciente de acusaciones.
8. Principio de la verosimilitud. Construir argumentos a partir de fuentes diversas, a través de los llamados globos sondas o de informaciones fragmentarias.
9. Principio de la silenciación. Acallar las cuestiones sobre las que no se tienen argumentos y disimular las noticias que favorecen el adversario, también contraprogramando con la ayuda de medios de comunicación afines.
10. Principio de la transfusión. Por regla general, la propaganda opera siempre a partir de un sustrato preexistente, ya sea una mitología nacional o un complejo de odios y prejuicios tradicionales. Se trata de difundir argumentos que puedan arraigar en actitudes primitivas.
11. Principio de la unanimidad. Llegar a convencer a mucha gente de que piensa «como todo el mundo», creando una falsa impresión de unanimidad.
Son de Goebbels.
2. Principio del método de contagio. Reunir diversos adversarios en una sola categoría o individuo. Los adversarios han de constituirse en suma individualizada.
3. Principio de la transposición. Cargar sobre el adversario los propios errores o defectos, respondiendo el ataque con el ataque. "Si no puedes negar las malas noticias, inventa otras que las distraigan".
4. Principio de la exageración y desfiguración. Convertir cualquier anécdota, por pequeña que sea, en amenaza grave.
5. Principio de la vulgarización. Toda propaganda debe ser popular, adaptando su nivel al menos inteligente de los individuos a los que va dirigida. Cuanto más grande sea la masa a convencer, más pequeño ha de ser el esfuerzo mental a realizar. La capacidad receptiva de las masas es limitada y su comprensión escasa; además, tienen gran facilidad para olvidar.
6. Principio de orquestación. La propaganda debe limitarse a un número pequeño de ideas y repetirlas incansablemente, presentarlas una y otra vez desde diferentes perspectivas, pero siempre convergiendo sobre el mismo concepto. Sin fisuras ni dudas. De aquí viene también la famosa frase: «Si una mentira se repite suficientemente, acaba por convertirse en verdad».
7. Principio de renovación. Hay que emitir constantemente informaciones y argumentos nuevos a un ritmo tal que, cuando el adversario responda, el público esté ya interesado en otra cosa. Las respuestas del adversario nunca han de poder contrarrestar el nivel creciente de acusaciones.
8. Principio de la verosimilitud. Construir argumentos a partir de fuentes diversas, a través de los llamados globos sondas o de informaciones fragmentarias.
9. Principio de la silenciación. Acallar las cuestiones sobre las que no se tienen argumentos y disimular las noticias que favorecen el adversario, también contraprogramando con la ayuda de medios de comunicación afines.
10. Principio de la transfusión. Por regla general, la propaganda opera siempre a partir de un sustrato preexistente, ya sea una mitología nacional o un complejo de odios y prejuicios tradicionales. Se trata de difundir argumentos que puedan arraigar en actitudes primitivas.
11. Principio de la unanimidad. Llegar a convencer a mucha gente de que piensa «como todo el mundo», creando una falsa impresión de unanimidad.
Son de Goebbels.
10 comentarios:
Demostración inequívoca de que la mente de Goebbels era tan "demócrata" (al menos) como los partidos a los que votan casi todos los españoles.
Especialmente importantes me parecen el punto 1 (Zapatero, Aznar, Bush, Franco, etc.), el 5 ("Cuando yo gobierne, bajará el paro") y, sobre todo el 11( "Pienso lo contrario que tú, y haré lo contrario de lo que a tí te gustaría, pero vótame, porque me va a votar mucha gente").
El punto 11 se lo trabajan especialmente con las profecías autocumplidas ("encuestas" las llaman) del CIS y los medios afines, que nos anuncian cuál debe ser (y será) el resultado de las elecciones.
Esta entrada me la apunto para aprendérmela de memoria. Gracias por colgarla.
Efectivamente. Eran los maestros de la propaganda, indiscutiblemente.
Javier
Y la gran "facilidad para olvidar" ...de las masas manipuladas ...es la clave para que la historia se repita ....
Vaya, ya te iba a felicitar cuando he visto al final que no eran tuyos...pues habrá que felicitar a Goebbels, porque, efectivamente, agota la cuestión, son todos los que están y están todos los que son.
Incluso lo he confrontado con "la Biblia" de la técnicas y reglas del juego del poder (Las 48 Leyes del Poder, de Robert Green.Espasa.)y no falta ninguno.
Rectifico mi anterior comentario.Sí que falta, al menos uno:
-Principio de la inversión de la carga de la Prueba o el que pega primero, segundo y tercero, pega tropecientas veces más gratis.
Interesante artículo, y mas cuando hace apenas unos días compré le dominio PROPAGANDA.es.
Saludos.
Reconozco que alguna vez he usado alguno de estos principios (el 1 y 2, que están muy relacionados, y el 4). El caso es que yo carezco de "agenda", no como quienes cumplen continuamente los 11 principios.
¿Y quiénes cumplen estos 11 principios? Quienes su sueldo depende de ellos. Quienes quieren vivir (y viven) a costa de los demás.
Un saludo.
Que va, que va. Estos son los principios que regían hasta 1945. Desde entonces todos los estudios de ingeniería social financiados por fundaciones Rockefellers, Fords y demás gente de bien, no acaban de salir a la luz.
Si en 1945 estaban tan puestos los alemanes, que no habrán avanzado en estos años, teniendo en cuenta que muchos de sus ingenieros sociales fueron recauchutados en buenos trabajadores de USA y la URSS.
Pero sí, son los principios. Y sí, al tal Goebbles lo tienen en un marco en lo alto de un pedestal en un altar en algún despacho.
Meciendocunasenplanconspiranoico.
I wish not acquiesce in on it. I think nice post. Specially the title attracted me to read the whole story.
Genial post and this post helped me alot in my college assignement. Thank you for your information.
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