Se discutió vehementemente en el
sínodo de Londres: Carranza había ido en el séquito de Felipe II
siendo aún príncipe; se apoyaba en su estrecha relación con Las
Casas.
España no tuvo nunca esclavos: por eso
no hay negros en hispanoamérica, tan sólo en Brasil; o no había.
Los esclavos eran para sustentar la
riqueza que generaban las colonias: España jamás tuvo colonias, por
una simple deducción: España descubrió el mundo, y lo articuló
conforme estaba articulado entonces el sistema español; todo eran
territorios de la corona, y al efecto era lo mismo Filipinas que
Soria o Valencia; todos eran españoles y no distintos. Lógicamente
en todos los casos hay que considerar la condición humana, pero las
colonias las hicieron los países que querían su parte del pastel
que era el mundo y se articularon así tras la articulación hecha
por España del mundo entero: para mantener esas tierras conseguidas
por el vigor de la envidia y no por su esfuerzo necesitaron esclavos,
de ahí el problema de la esclavitud y la existencia de negros en
determinados territorios y no en otros: siempre fueron llevados a la
fuerza, siempre para las potencias coloniales África era una granja
de personas; las cuestiones hoy día mantienen esa estructura mental
respecto a África como demuestra todo hoy: la división de
oriente medio se la debemos a Lawrence de Arabia y las tensiones que
hay no son ajenas a las tensiones de las potencias coloniales.
España, país matriarcal donde los
parricidios lo son siempre de las mujeres a sus maridos es el único
país que siempre mantuvo los apellidos de la mujer y su poder real,
a pesar de la demagogia mentirosa: los países que denigraban a la
mujer son los que proyectaron su ignominia denostando a España: no
eran las mujeres oprimidas, y es de los pocos países donde no se las
vejaba por sistema, por eso se denostaba tanto a España: culpan a
otros vehementemente para que no se vean los propios defectos.
A partir de la configuración moderna
de la iglesia católica por Cisneros, Vitoria, Luis Vives.....que
culmina con el Concilio de Trento, el mundo se configura con dos
sentidos: por un lado el catolicismo que es España, por el otro la
herejía que tiene como máxima prioridad dinamitar a España y al
catolicismo en todas sus vertientes; No es El Vaticano el guardián
del catolicismo, es España y la responsabilidad de su difusión es
de España, al igual que es España quien preserva la herencia de
Roma hasta la actualidad, aunque ahora muchos no lo quieran ver en su
presbicia de turistas fin de semana: Italia tiene doscientos años,
es España quien configura el mundo según la estructura romana y con
el paradigma del catolicismo como superestructura cultural y guardián
de la esencia de la cultura.
Desde el marasmo ideológico que es el
mundo no católico se dan fenómenos aberrantes y se potencia la
aberración: por un lado en el mundo sajón se santifica el sistema
político de manera tal que siendo la cabeza de la iglesia la reina,
en Inglaterra se mantiene la situación del poder temporal y divino
unidos: eso da pábulo a cualquier aberración; por otro se alienta
la algarada de 1789 en Francia cuyos únicos resultados son palabras
pomposas y rimbombantes...frente a una realidad de esclavitud y
sumisión: el señor feudal pasa a ser el estado, las personas dejan
de tener consideración como tales y pasan a ser tan sólo parte de
un engranaje sin ningún valor por sí mismas.
El mundo sajón acuña la moneda como
objeto de culto: la religión es algo nacional y nada que ver con la
fe; acaba siendo un estado al servicio de la moneda y nunca de las
personas.
Para justificarlo en su propaganda, lo
llaman democracia.
A partir de la propaganda desde los
años 70 y el bombardeo a nivel mundial para homogeneizar a toda la
población como un marasmo de organización social, jerarquía y
sumisión al sistema se magnifica la palabra democracia y un sistema
aberrante el cual se somete al más poderoso; en España, cuando
Franco deja de apoyarse en la base social de la falange y empieza a
hacerlo en el opus dei, es cuando comienza el proceso de “transición
a la democracia” que ahora padecemos: los ministros de F. Glez
y casi todos los cargos que han llevado a esta aberrante situación
fueron los niños mimados del régimen que prepararon todo esta
iniquidad; se dicen palabras biensonantes y frases huecas para hacer
lo que mande el mandamás; nunca España había sido así, y ahora el
progrecesamiento hacia la democracia nos ha supuesto la degradación
social más burda de la historia: la progrhez es la primera
generación de la humanidad que deja menos herencia y peor que la
recibida; como Saturno han devorado a sus hijos y han destrozado lo
heredado, y siguen justificándose en un bucle autorreferencial de
lengüaje abyecto en el cual retozan como cerdos en la mierda; y nada
les ha importado destruir a sus propios hijos.
Cuando las cosas se ponen mal, hay que
pararse y reflexionar, volver a las raíces, deshacer la infamia y
desde las bases de nuestra cultura seguir adelante por nuestro
camino: todo lo que ha sido la modernidad y progrecesamiento ha sido
el grave error que a nosotros de nada nos sirve: el enorme aparato de
propaganda que constituyen las series de tv, cine y demás modelos en
los cuales la gente se mira y toma modelos hace que la realidad se
confunda en los pobres de espíritu: se plantean soluciones políticas
muy propias para USA, impropias para España, y todos creen vivir en
algún gran puesto de serie de tv americana que les gusta, nadie es
el esclavo que muere a palos: y todos inconscientemente se adecuan a
un papel que se otorgan a sí mismos: además de despersonalizarse,
la confusión les hace alejarse de su propio ser y saber su propio
valor para diluirse en sistema mercantil en el cual el valor de la
persona no es intrínseco sino el valor que le otorga la sociedad: de
ese modo, toda aberración es justificada.