Hay un motivo para hacer las cosas, una causa, una motivación o un impulso: nunca hay un móvil. Lo de buscar el móvil del crimen en las series yankis es de poner a todos los policías a buscar teléfonos personales, que son teléfonos personales, no móviles.
A un delincuente se le detiene. A un político se le debería detener. A un militar se le arresta, si es civil se le detiene.
Nadie es positivo ni negativo, eso los electrones o los imanes. La gente es optimista o pesimista, bondadosa o malencarada, taimada y ruin, buena y humilde, esperanzada o malasombra pero nadie es positivo ni negativo.
Las películas, los cuadros, las fotos y las piernas de las mujeres se ven; lo de visionar es una cursilada para por la palabra intentar magnificar un hecho que ya está definido. Ni se visiona ni se audiciona ni se toquetea el género, que esas cursiladas para darse importancia no son ya de pedantes, ya es pluscuamcursilería.
La percolación es un fenómeno por el cual el agua cuando va por todas las tablas trasciende su campo y se pasa al del vecino: una precuela es pues el terreno del vecino mojado cuando tu has regado.
Los habitantes y el idioma de finlandia son el finés y los fineses.
Los anarquistas impulsaban la creación de escuelas y apoyaban a los católicos en sus escuelas siempre: porque hay que saber leer y escribir bien, para que no te engañen, y porque si escribes bien piensas bien. Si cada día se habla peor se piensa peor y se hacen más memeces y se leen más estupideces, así que menos repicar palabras oídas y a entender lo que dicen otros, bien entendido que os están engañando.
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